Cellers Joan d’Anguera  Cellers Joan d’Anguera

Hoy bajamos hasta Darmós, parte más septentrional del Montsant. Zona tradicionalmente considerada húmeda por sus suelos llimo-arenosos de productividad alta, para esta zona, y con guijarros del antiguo paso de ríos de abundantes caudales. Zona aireada por el viento seco y càlido del norte llamado Sert, junto con ràfagas de Garbí que refrescan las jornadas más cálidas.

Cellers Joan d’Anguera fundada en el año 84 por el patriarca de la familia, época en la que se empezaba a gestar el Priorat 2.0. Empezaron igual que muchos otros buscando vinos dónde sobresalieran las notas de fruta madura, el maquillaje de madera nueva con mucha maduración y estructura. Joan “padre” fue el primero en plantar syrah en la zona.

En el año 2009 los dos hijos de la familia, Joan y Josep decidieron de la mano de uno de los grandes de este país, Joan Valencia, apostar por un concepto totalmente innovador y cambian su visión de viticultura tradicional por un producto más elegante, más amable. Comienzan a apostar por la agricultura biodinámica de una manera muy estricta y rápidamente la vid les ha entregado unos resultados exageradamente buenos.

La finca Altaroses, es una finca que enamora sólo verla. Plantación en vasos de viñas viejas de garnacha orientación norte que comparten terroir con  almendros y olivos. Te hace desear volver en primavera para ver la expresión floral y aromática que puede transmitir este viñedo. Joan nos explica que los “sabios” del pueblo ya sabían que terrenos eran buenos para una cosa o otra y de dónde podía extraer más jugo. En la misma finca vemos una parte arada y una parte con cubierta vegetal; reflejando así el estudio constante del terreno. Dosis muy bajas de azufre en polvo en viña y tratamiento de cobre sólo cuando la planta lo pide. Trabajan con abono animal de la zona pero su intención es cambiar-se al abono vegetal.

Joan nos defiende las variedades autóctonas de la zona y no porqué ahora “toque” sino porque él ha sufrido en sus propias manos esas variedades plantadas con moda que no han conseguido sacar el provecho necesario. De hecho, están arrancando poco a poco variedades “foráneas” y plantando cariñenas y garnachas.

Estos dos saben dónde quieren llegar; y gracias a esa humildad y cabezonería, detectas el aprendizaje año a año en sus botellas.

En la bodega, poco a contar, pisados suaves y con los pies de una manera muy cuidadosa, fermentaciones en depositos de hormigón. Y crianzas en barricas de roble viejas, muy viejas. Joan nos explica que una barrica buenas y vieja consigue elevar el vino a cuotas que el hormigón no consigue.

Cellers Joan d’Anguera CATA: En la guardilla, con vistas a la serra d’Almos, nos ponemos a probar sus vinos. El primero, el joven; buque tradicionalmente insignia de la bodega. Un estallido de color y frescor que nos transporta a una falsa acidez, pomelo, y un paso por boca anterior y sutil que nos hace flotar. Nos desvela que esto es el 2016, un vino que le falta todavía el paso suave por barricas de roble un pequeño paso de descanso en botella. Si esto está cómo estaba y todavía le falta elevarse aún más no somos capaces de imaginar que nos encontraremos en Marzo. Segunda prueba Altaroses 2015, embotellado pero descansando en rima para asentar todo su potencial… y aquí nos sorprendimos! Joan nos enseño la diferencia entre 2014 y 2015, tendremos que esperar los 6 meses que le quedan de botella pero ese viaje al Ródano está asegurado.
Abrimos Finca l’Argatà del 2014 y nos explica que para el 2015 han decidido aumentar su tiempo de crianza para conseguir un vino que huela a vino. Nos hace un “coupage” directamente de barricas y vemos ese aprendizaje del que hablábamos antes y nos hace entrever el sentido del cambio que hicieron en 2009. Esto puede llegar a ser un antes y un después en la zona, un 3.0.

Finalmente y sin saber bien dónde ubicarlo nos muestra su herencia familiar en el Planella, un vino que les cuesta mucho esfuerzo hacerlo para que no se quede atrás en el salto cualitativo que están haciendo, un versión no actualizada de la zona.

Cellers Joan d’Anguera

Creemos acertar al decir que el límite de estos dos chicos sólo lo conocen ellos y hacia dónde nos llevaran con este vuelo tan aerio y amable, sin perder para nada la fuerza del terroir.

Muchas gracias Joan, ha sido un placer! ??